01 Ago Impuestos y gastos fijos que debes tener en cuenta si eres autónomo
Si eres autónomo, sabes que los impuestos son una parte importante de tu actividad económica. Pero ¿sabes cuáles son los impuestos que debes pagar y cómo hacerlo? En este post te explicamos los principales impuestos que afectan a los autónomos y cómo cumplir con tus obligaciones fiscales.
Veremos los impuestos y gastos fijos que vas a tener si eres autónomo. Te ofrecemos consejos y recomendaciones para tener una gestión financiera adecuada y cumplir con tus obligaciones legales.
Impuestos que deben pagar los autónomos
Los impuestos que debes tener en cuenta si eres autónomo son el IRPF y el IVA (el IGIC en Canarias). El IRPF es el impuesto sobre la renta de las personas físicas, que grava tus beneficios como profesional. El IVA es el impuesto sobre el valor añadido, que recaudas de tus clientes y debes ingresar a Hacienda cada trimestre.
- El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF): es el impuesto que grava los ingresos que obtienes por tu actividad profesional. Debes presentar cada trimestre el modelo 130, donde declaras tus ingresos y gastos, y aplicas un porcentaje de retención (generalmente el 20%) sobre el beneficio obtenido. Al final del año, debes presentar la declaración de la renta (modelo 100), donde se hace el ajuste definitivo entre lo que has pagado y lo que te corresponde pagar según tu situación personal y familiar.
- El Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA): es el impuesto que grava el consumo de bienes y servicios. Debes repercutirlo en tus facturas a tus clientes, y deducirlo de las facturas que recibes de tus proveedores. Cada trimestre, debes presentar el modelo 303, donde declaras el IVA que has cobrado y el que has pagado, y pagas o te devuelven la diferencia. Al final del año, debes presentar el resumen anual del IVA (modelo 390), donde se recopila toda la información del año.
- En Canarias el IVA es sustituido por el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC): Cada trimestre, debes presentar el modelo 420, donde declaras el IGIC que has cobrado y el que has pagado, y pagas o te devuelven la diferencia. Al final del año, debes presentar el resumen anual del IGIC (modelo 425), donde se recopila toda la información del año.
- El Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE): es el impuesto que grava el ejercicio de una actividad económica. Los autónomos están exentos de pagar este impuesto, pero deben darse de alta en el mismo, indicando el epígrafe que corresponde a su actividad. Para ello, deben presentar el modelo 036 o 037 en la Agencia Tributaria.
Estos son los impuestos más habituales que deben pagar los autónomos, pero puede haber otros impuestos que afecten a tu actividad, según el sector en el que operes, la forma jurídica que adoptes o las operaciones que realices. Por eso, es importante que te informes bien y que cuentes con el asesoramiento de un profesional que te ayude a cumplir con tus obligaciones legales.
Gastos fijos que deben considerar los autónomos
Como te decíamos al principio de este artículo, si eres autónomo, sabes que hay una serie de gastos fijos que debes considerar cada mes para mantener tu actividad. Algunos de estos gastos fijos son:
- La cuota de autónomos: es el pago mensual que debes hacer a la Seguridad Social para tener derecho a las prestaciones sociales como la jubilación, la baja por enfermedad o el paro. La cuota de autónomos varía según tu base de cotización, tu edad y tu actividad.
- Los gastos de alquiler, luz, agua, teléfono e internet: son los gastos que debes asumir si tienes un local, una oficina o un despacho donde desarrollas tu actividad. Estos gastos son deducibles si puedes demostrar que están relacionados con tu trabajo y que los usas exclusivamente para ello.
- Los gastos de material, suministros, transporte y publicidad: son los gastos que debes hacer para comprar los productos o los recursos que necesitas para realizar tu trabajo, así como para desplazarte o promocionarte. Estos gastos también son deducibles si puedes justificarlos con facturas.
Consejos para la gestión adecuada de impuestos y gastos fijos
Si eres autónomo, sabes que la gestión de impuestos y gastos fijos es una de las tareas más importantes y complejas de tu actividad. No solo tienes que cumplir con tus obligaciones fiscales, sino también optimizar tus recursos y controlar tus gastos. Te damos algunos consejos para que puedas llevar una gestión adecuada de impuestos y gastos fijos de los autónomos.
- Planifica tu calendario fiscal. Es fundamental que conozcas las fechas y plazos de presentación de los diferentes impuestos que te corresponden como autónomo, como el IVA o IGIC, el IRPF. Así podrás evitar sanciones y recargos por retrasos o incumplimientos. Además, te recomendamos que reserves un fondo de contingencia para hacer frente a posibles imprevistos o variaciones en tu facturación.
- Lleva un registro actualizado de tus ingresos y gastos. Para poder declarar correctamente tus impuestos y deducirte los gastos que te corresponden, es imprescindible que lleves un control riguroso de todas tus operaciones económicas. Para ello, puedes utilizar herramientas digitales como programas de facturación o contabilidad, que te facilitarán la tarea y te ahorrarán tiempo y errores.
- Elige el régimen fiscal que más te convenga. Dependiendo de tu actividad, volumen de negocio y situación personal, puedes optar por diferentes regímenes fiscales que tienen distintas implicaciones en tu tributación. Por ejemplo, puedes elegir entre el régimen general o el simplificado del IVA, o entre el método de estimación directa o el de estimación objetiva (módulos) para el IRPF. Infórmate bien sobre las ventajas e inconvenientes de cada opción y elige la que más se adapte a ti.
- Aprovecha las deducciones fiscales. Como autónomo, puedes deducirte una serie de gastos que están relacionados con tu actividad profesional, siempre que estén debidamente justificados y registrados. Algunos ejemplos son los gastos de suministros, alquiler, transporte, formación, publicidad o seguros. Así podrás reducir tu base imponible y pagar menos impuestos.
- Controla tus gastos fijos. Los gastos fijos son aquellos que tienes que asumir independientemente de tu nivel de ingresos, como la cuota de autónomos, el alquiler del local o la amortización de equipos. Estos gastos pueden suponer una carga importante para tu negocio, por lo que es conveniente que los revises periódicamente y busques formas de reducirlos o negociarlos.
Como ves, ser autónomo implica tener en cuenta una serie de impuestos y gastos fijos que debes pagar cada mes o cada trimestre. Es importante que los conozcas y los controles para evitar sorpresas y optimizar tu rentabilidad. Si necesitas ayuda, puedes contar con un gestor o un asesor que te oriente y te facilite la tarea.
Estos son algunos consejos para la gestión adecuada de impuestos y gastos fijos de los autónomos. Esperamos que te hayan sido útiles y que puedas aplicarlos en tu día a día. Recuerda que una buena gestión fiscal y financiera es clave para el éxito de tu negocio.
